viernes, marzo 11, 2011

Rest: Capítulo 18







Billie y Mike iban frecuentemente a mi casa; y por suerte nuestros encuentros no eran para nada incómodos. Nos quedábamos hasta tarde viendo películas; o yo escuchaba cómo los chicos tocaban con una guitarra acústica que había encontrado en una habitación que servía como bodega y así pasábamos los días cuando no había nada más que hacer.

De Uriel no había sabido nada; absolutamente nada.
Cada vez que me acordaba de él sentía una ansiedad por recibir algún indicio de él, que me dijera las cosas que estaba haciendo mal, que me dijera que no podía tener sentimientos, que dejara de lado esas ideas de besar a Billie cada vez que estábamos cerca.
En las noches, cuando ya no tenía en qué mantener mi mente ocupada, me preguntaba si Uriel sabría todo lo que pasaba conmigo aunque no estuviera; o si de verdad volvía a tener la libertad que solía tener al estar viva…

- Sue… ¿qué harás para navidad?- me preguntó Mike un día… que estábamos comiendo pizza
- ¿Cuándo es?- pregunté; estaba completamente perdida con todo lo que fuera fechas y que implicara el ver un calendario.
- Ehm… en dos días.- me respondió sorprendido- ¿va a llegar tu papá?
- No creo; no e ha avisado.- respondí.
- Billie ¿por qué no va a tu casa?- el aludido levantó la vista; y miró a Mike igual que yo, no entendí de qué estaba hablando.
- ¿Qué dijiste? No estaba prestando atención
- Que Sussan estará sola en navidad; y que podría ir a tu casa… ¿o no?
- Ah; claro…si no tienes planes más importantes- respondió aún medio confundido, mirándome con la última frase.
- No entiendo de qué están hablando…
- De la cena que hacen en la casa de Billie para navidad… y van todos sus hermanos; es bastante entretenido… y siempre nos quedamos hasta el día siguiente para abrir los regalos—me dijo Mike
- ¿Y tú no estás en tu casa?- pregunté sin querer mirar al guitarrista.
- No, en mi casa no celebramos la navidad como en la casa de Billie.- me dijo, ante lo que asentí- ¿Y? ¿Irás?
- Yo creo… o sea; si es que ustedes quieren que vaya…
- Obvio que sí- dijo Billie, incorporándose a la conversación.- Mi mamá cocinará pavo y esas cosas;  somos tantos  que un invitado más no le molestará.
- Ok, entonces estaré ahí…- dije
- Te paso a buscar, si quieres.- comentó Mike, con un trozo de pizza en la boca.
- Sería genial.- respondí.- Tendré que ir a comprar regalos; no me acordaba que sería navidad y no he comprado nada.-
- Somos dos.- admitió Billie.
- Yo ya compré- dijo Mike con una sonrisa
- ¿Qué le vas a regalar a Jessica?- le pregunté
- Un globo; un peluche y un chocolate.-
- Te lo dije.- susurró Billie, y yo sólo reí
- De seguro le va a gustar… ¿ella también estará en tu casa?- le pregunté a Billie
- Noup, Mike la verá el 25… en la noche creo

Asentí. Había olvidado completamente lo de la navidad, realmente… así que iba a tener que comprar regalos. ¿Qué le podía comprar a Billie y a Mike?
Ese día no iba a poder ir a ver nada; así que dejé de pensar en eso y lo pasé bien con los chicos hasta que decidieron volver a sus casas.

Al día siguiente me levanté temprano y me fui a Berkeley a ver qué comprar. Se me haría muy difícil elegir algo…

Anduve dando vueltas por varias horas; hasta que pasé por una tienda de ropa y vi una bufanda negra con algunas rayas blancas; así que eso le compré a Mike; quien se quejaba del frío y de que no tenía bufanda… así que se la compré. 

Sólo me faltaba Billie. Lo más difícil…Creo que recorrí las tiendas de Berkeley al menos unas tres veces hasta que me decidí.
Una libreta, con detalles en cuero y cosas así para que escribiera sus canciones.
Era perfecto para él, que siempre andaba escribiendo en la parte trasera de los cuadernos de colegio o en hojas sueltas.

Me demoré todo el día; pero valió la pena… así tenía todo el día siguiente sin tener que preocuparme por los regalos y cosas así.

Como pensé, ese día los chicos no fueron a mi casa; tal vez Billie había ido a comprar los regalos o cualquier cosa.
Al día siguiente sólo vino Mike a saludarme y luego fue a la casa de Billie a tocar; me invitó pero no quise ir.
No me gustaba estar tan cerca de Billie Joe; tenía que controlarme demasiado y no era agradable.
Luego de la conversación que tuvimos yo realmente evitaba a toda costa estar a solas con él, porque no me creía lo suficientemente fuerte como para resistir acortar la distancia, tenerlo cerca….  Pensar en lo que no podía hacer me hacía querer hacerlo más…Como suele suceder con la mayoría de las cosas.

El 24 Mike llegó a mi casa y esperó a que me cambiara ropa y nos fuimos a la casa de Billie.
Yo iba con un vestido…blanco con detalles negros; bastante normal y cómodo. Me sentía bien.
Y en la mano llevaba las bolsitas con los dos regalos.

-¿Puedo saber si una es para mí?- me preguntó Mike
-Obvio que un regalo es para ti.-
-¿Qué es?
-Un regalo, sorpresa…- le dije.-
-Un regalo más que abriré este año.- dijo como un niño pequeño, lo que me causó gracia.

Seguimos hablando en el camino hasta la casa de Billie. Cuando vi varios autos en la entrada supuse que realmente irían muchas personas y empecé a ponerme nerviosa.

Tocamos la puerta, y salió la mamá de Billie a recibirnos.
Mike nos presentó, y luego entramos a la casa, que estaba decorada con cosas navideñas, haciendo que todo se viera bastante acogedor.
Nos sentamos en el sillón viendo como Ollie se volvía loca con toda la gente que había a su alrededor hasta que Billie apareció. Viéndose exactamente igual de apuesto que siempre.

-Perdón por demorarme tanto, Ana no me dejó tranquilo cuando le conté que venías.- dijo mirándome
-No te demoraste tanto.- le dije, y me acerqué a saludarlo. Luego estrechó su mano con Mike y nos fuimos al patio.

Estuvimos conversando y luego entramos para cenar. Billie me presentó a todos sus hermanos; cuñadas y cuñados; sobrinos… a toda la familiar mientras nos sentábamos y luego tuve que hablar de mí.
Que me había mudado de Nueva York por el trabajo de mi papá, que iba en el curso con Mike y Billie; y prácticamente eso.
La cena todo bien hasta que sentí el teléfono, y luego la mamá de Billie me estaba llamando.

-Tienes teléfono.- me dijo cuando llegué hasta donde ella estaba. Sentí la mirada de Billie Joe en mí inmediatamente, cuestionándome con esos ojos verdes… llenos de preocupación.
-Gracias- le dije y me di vuelta, cosa que Billie no se diera cuenta de lo que estaba hablando. -¿Aló?
-Sussan…- sentí la voz de Uriel. Un escalofrío recorrió toda mi espalda, y supe que no eran buenas noticias. –Deberías irte a casa, estar con los Armstrong no es buena idea; además, mañana vuelvo a casa.
-Pero…
-Nada, cuando llegue hablaremos.-sonó como mi padre cuando me retaba, me asusté-
-Bueno… nos vemos- le dije, aunque no estoy segura si habrá escuchado lo último porque me cortó el teléfono inmediatamente.

Volví a la mesa lo más normal que pude, pero al parecer no lo conseguí.
-¿Estás bien?- inquirió Billie. Simplemente asentí.-¿Quién era?
-Uriel.- respondí despacio
-¿Quién?
-Ah… mi papá- siempre olvidaba decirle “papá”, y Billie siempre se olvidaba de quien era cuando lo nombraba por su nombre
-Ah…¿Y está bien?
-Sí, aunque quiere que vuelva en un rato a la casa; volverá mañana.- 
- ¿Cómo se consiguió nuestro teléfono?- verdadera curiosidad pasó por sus ojos, pude notarlo inmediatamente. Me encogí de hombros.
- No sé- traté de inventar una excusa, rápido- Ah, es que ayer me llamó, le conté que vendría y me pidió el número de tu casa.

Asintió, sin convencerse totalmente. Pero esa era la idea más lógica que se me ocurría

-¿Tienes que irte de inmediato?- inquirió a los segundos después, con algo de enojo que pasaba casi desapercibido en su voz.
- No lo sé… supongo que puedo quedarme  hasta el final de la cena.
- Qué lástima- intervino Ollie.- Nos hubiese encantado que te quedaras un rato más.
Bajé la vista, luego de sonreirle y me concentré en mi comida. Luego puse algo de atención a la alegre conversación que tenían, traté de sonreír varis veces pero mi preocupación no me dejaba del todo tranquila.

Estuve con los chicos luego de que retiraran las cosas de la mesa, y después me despedí de todas las personas que estaban ahí, dejando para el final a Ollie y Mike.
Le indiqué a Billie que debía irme, y me acompañó hasta la puerta.
Salimos, y nos quedamos, quietos en la entrada de la casa.

-No creo que nos veamos mañana así que… feliz navidad.- le dije y le pasé la bolsa con su regalo.- Espero que te guste, y le dices a Mike que le dejé el suyo bajo del árbol.
-Bueno... pero espera, yo también te tengo algo.-nos separamos y entró corriendo a su casa, tardó algunos segundos y llegó a mi lado nuevamente, con la respiración agitada.- También espero que te guste; y Mike también te tenía algo… supongo que te lo entregará mañana o cualquier otro día.
-Gracias.
-Ábrelo cuando estés en tu casa… sería mejor.- asentí, y noté que no me estaba hablando como siempre.
-Billie… ¿te pasa algo? -negó-Siento que estás… molesto.- volvió a negar- Mientes horriblemente
-Me hubiese gustado que te quedaras; eso es todo.-

No le dije nada; sólo acaricié su mejilla y le di un beso en el mismo lugar unos segundos después.-

-Nos juntamos otro día… cuando papá llegue y las cosas vuelvan a lo de siempre.- asintió con la mirada hacia abajo.
-¿Quieres que te acompañe a tu casa?- soltó a los pocos segundos.
-No, sigue celebrando con tu familia… no te preocupes
-Me gustaría haber celebrado contigo.
-A mí igual- le dije, sinceramente.- Pero… me tengo que ir.
-Claro…- 

Me acerqué para despedirme, un beso en la mejilla y dar media vuelta; pero me quedé mirando sus ojos por varios segundos; en los que Billie quiso acercarse, darme un beso pero me corrí.

-Hora de irme. Dale saludos a todos.- fue lo único que dije y me di media vuelta para salir casi corriendo.

Llegué a eso de las once de la noche. No había nada que hacer, nadie con quien pasar noche buena pero no importaba… me fui a acostar casi de inmediato cuando llegué; y me olvidé del regalo de Billie…
Estaba nerviosa con la llegada de Uriel; y supe luego de acostarme que ya estaba cerca porque los zumbidos en mi oído aparecían nuevamente; aunque con mayor intensidad, sentí cómo Billie me llamaba internamente, esperaba que me devolviera y estuviera con él. Lo sentía, claramente; como nunca antes a tal distancia de donde se encontraba…

La conexión se había intensificado; y no sé si fue por la ausencia de ésta durante un tiempo o si tenía relación con lo que en ese momento sentíamos.

4 comentarios:

  1. Me cae mal Uriel en estos momentos :(! y me cae mal Sussann por no abrir el regalo al tiro! xD y a ti te amo, pero POR QUÉ CHUCHA NO ME AVISAS CUANDO SUBES CAP?! xD
    love ya :B

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  2. Por qué tuve que Uriel cagar la cena ¬¬ Billie la necesita, la ama, me pareció tierno eso del llamado interno xD

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  3. Uriel es un aguafiesta! Pero que Sussan olvide abrir el regalo de BJ es imperdonable xD

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  4. a veces le falla a la pobre :) xd

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